Midiatização, polarização e intolerância (entre ambientes, meios e circulações)

Natalia Raimondo Anselmino 134 fuertemente interpelativas con información sobre la moviliza- ción, el hashtag #RosarioSangra se convirtió en trending topic en Twitter (GINDIN et al., 2019). Ilustración 5 – Imágenes que circularon en Twitter antes de la primera marcha Fuente: Twitter. Recién el 22 de agosto, tres días antes de la moviliza- ción, empiezan a aparecer de a poco algunas notas periodísticas en donde se alude a la marcha programada para el 25, dando entonces allí inicio al umbral de visibilidad del fenómeno en los medios masivos. Por lo general, eran noticias que hacían hinca- pié, particularmente, en el estado emocional de la ciudadanía, es decir, en los afectos que habrían disparado la protesta. En esos primeros discursos mediáticos proliferaron sintagmas como “clima caldeado”, “hartos”, “estamos cansados”, “aseguran no sa- ber qué más hacer”, “no va más” y frases de este estilo (RAIMON- DO ANSELMINO et al., 2018). Por otra parte, es preciso señalar que entre quienes impulsaron y organizaron las marchas se destaca un colectivo social en particular, que es el de los familiares de víctimas de in- seguridad . Tal como advierten Reviglio y Castro Rojas (en pren- sa), los colectivos de familiares de víctimas de inseguridad no son excepcionales en la esfera pública actual y devienen un ac- tor relevante en los estudios sobre movimientos sociales, con- virtiéndose, incluso, para el pensamiento sociológico (cfr. PITA, 2010), en un tipo particular de activista político 12 . Tal es así que, 12 Según recuerdan los autores, “el antecedente más saliente de colectivos de fami- liares lo conforman los vinculados con los crímenes de la última dictadura militar: Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas, Madres de Plaza de Mayo, Abuelas de Plaza de Mayo, las agrupaciones H.I.J.O.S. y Hermanos son

RkJQdWJsaXNoZXIy MjEzNzYz