En busca del movimiento perdido en la investigación comunicacional 73 estadísticas del tipo censo (en las cuales se trabaja con todos los individuos que componen una población o comunidad en un área determinada y en un momento dado), sino que una IEC tra- baja con muestras estadísticas de clúster y por tanto implica una inversión financiera muchísimo menor. Para ver otros casos de aplicación de esta metodología les invito a entrar al mapa interactivo de IECs recientemente inaugurado (www.sandramassoni.ar/investigación), pero que ya tiene más de 55 proyectos que se han sumado al registro desde distintos países de Latinoamérica. Los comunicadores, al investigar, podemos aportar otros registros de los actores diferentes a los de otros científicos sociales como los economistas, o los sociólogos; ellos son expertos en tableros de comando, sus disciplinas están centradas en aprovechar el control. Con esta metodología de investigación comunicacional participativa inter y transdisciplinar trabajamos en escaparnos de la linealidad que es típica de los estudios tradicionales. La ta- rea de un investigador enactivo entonces es reconocer y caracterizar a las MS como agrupamientos de actores no escindidos del tema que aborda la estrategia comunicacional. Una IEC trabaja en aprovechar también la autoorganización y poner recursos comunicacionales para hacerla crecer. Lo que no crece, tarde o temprano se agota y se muere. Por eso hablamos de la IEC como una metodología para reconocer y acompañar lo vivo (MASSONI, 2019 L ) a . única manera de que los actores participen auténti- camente es que se les convoque desde sus intereses y necesidades actuales en torno al tema de la estrategia comunicacional y teniendo muy en cuenta cuál es la emocionalidad desde la que se vinculan hoy con el problema. El paradigma de lo fluido en el que trabajamos hace ya años se ocupa de este tema retomando los trabajos señeros de Humberto Maturana y Francisco Varela sobre el tema. La CEE es una crítica al poder y sus dispositivos de con- trol, una crítica a la maquinaria de la infelicidad y la destrucción del planeta. No es posible un análisis exterior a lo analizado, no es posible una crítica exterior a lo criticado. Sólo es posible la auto- crítica. Nuestras acciones construyen mundos desde la comunica-
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